Boletín Nº 49: Entrega del V Premio Publicitario

Deducciones del 25% en la renta por donaciones a ONG (fundaciones, asociaciones,…)

Amigos, hemos recibido consultas sobre cuáles son las deducciones fiscales  por donaciones a ONG, ya  que muchas personas tienen previsto realizarlas antes de final de año. El porcentaje suele ser del  25% del importe de la donación en la cuota íntegra.

Si os interesa saber más, os remitimos a un resumen muy bueno de Fundación Lealtad,  que transcribimos a continuación: 

Como donante puedes deducirte un porcentaje de tu aportación económica a favor de ONG en el IRPF (Impuesto Sobre la Renta de las Personas Físicas). Para ello, debes contar con un certificado que debe emitir y enviarte la ONG que haya recibido tu donación.


El importe de la deducción varía según el régimen fiscal al que esté sujeta la ONG con la que hayas colaborado.

• El 25% del importe de la donación en la cuota íntegra –comentaros que este es el caso mayoritario-  con un límite del 10% de la base liquidable, en el caso de fundaciones y asociaciones sujetas a la ley 49/2002 (entidades calificadas por la ley en su artículo 16 y disposiciones 5ª, 6ª, 7ª, 9ª y 10ª y los consorcios a que se refiere su artículo 27.2 segundo).
• El 10% del importe de la donación con un límite del 10% de la base liquidable, en el caso de fundaciones y asociaciones declaradas de Utilidad Pública (art. 69.3 R.D. Legislativo 3/2004 del texto refundido de la Ley del IRPF).
También, debes tener en cuenta si la comunidad autónoma en la que resides está sujeta a un régimen foral particular o si ha establecido deducciones adicionales por donaciones a ONG. Además, la actividad con la que has colaborado puede haber sido clasificada como actividad prioritaria de mecenazgo por la ley 49/2002 dando lugar a un mayor porcentaje de deducción.

Un saludo, Jordi Roca

Fuente:http://www.fundacionlealtad.org/web/jsp/colabora/particulares/deducciones.jsp

Testimonio hermana Adela (República Democrática de Congo)

Cuando la vi entrar por la puerta -a la hermana Adela- observé a una señora mayor, muy mayor. Nos saludamos. Y al cabo solo de unos segundos, cuando empezó a hablarme, deje de ver las arrugas de su cara para sentir su joven corazón, su entusiasmo, su energía, su vitalidad,… rápidamente pensé en la suerte de las niñas y niños de la isla Idjwi al tenerla con ellos (en Bukabu, República Democrática de Congo –bueno, lo de “democrática” no deja de ser un chiste de mal gusto-).

Isolana Fundación mantiene proyectos en esta localidad africana que gestiona la hermana Adela.

Ella me comentaba que desde 1994 hasta la fecha han asesinado a 5 millones de personas en ese país. No se si me suena haber visto en algún telediario la noticia, tal vez no, como eso no importa a casi nadie, seguramente se olvidaron.

Pero volvamos al encuentro: la isla de Idjwi cuenta con 200.000 habitantes repartidos en 380 Km2. Por supuesto, no tienen electricidad, o sea, no tienen luz.  

-¿Coches hay? –le pregunté a Adela. 

-Sí, hay 3 o 4, no lo se exactamente, uno de ellos es la ambulancia –me contestó ella, tras un momento de duda.

Yo lo estaba viendo todo un poco negro pero me atreví con otra pregunta: 

-¿Pero agua al menos si tendrán? Ustedes están en medio de un lago.

La hermana reaccionó con una carcajada.

-Sí, estamos en medio de un enorme lago de agua dulce, pero… del fondo emerge gas metano y por ello el agua no es potable”.

En ese momento decidí no preguntar más. Mis preguntas tenían una respuesta poco favorable para todos los habitantes de la isla.

-Pero tenemos suerte –prosiguió Adela-: unos vascos nos han ayudado y nos llega el agua de las montañas, gracias a 100 kilómetros de tuberías.

 

Uf! Me quede un poco más tranquilo. 

-Cuando yo llegue a la isla hace 21 años –contaba Adela- las cosas estaban peor. Yo venía de Burundi donde pasé otros 21, o sea hace ya 42 años que estoy en el continente negro. Empezamos educando a 30 niños, las niñas no se contemplaba que tuvieran acceso a la educación. En la actualidad el instituto de bachillerato reúne a 550 alumnos de los cuales la mitad son niñas. ¡Sí! Hemos avanzado y mucho. 

Noté a Adela feliz en sus adentros. 

-Algunos de los niños –siguió- tienen que andar 3 y 4 horas de ida y otras tantas de vuelta cada día para asistir a las clases. Por eso es tan importante darles una papilla al medio día. ¿Entiendes? –me preguntó.

Yo asentí con la cabeza. Claro que lo entendía. Pese a mi sorpresa ¡algún niño andaba 8 horas al día! La hermana Adela añadió, sonriendo, que la ayuda de la Fundación Isolana se invertía en esa papilla que ayudaba a mejorar el rendimiento de los alumnos notablemente.

Adela continuó con su relato:

-La alimentación de los habitantes de la isla es muy básica: plátanos y mandioca, ya que la tierra es árida para cultivar. Y fíjate, actualmente hay una plaga de gusanos que afecta a los plátanos, cosa que hace más difícil aún alimentarse. Por eso uno de nuestros proyectos consiste en un centro social donde enseñamos a mujeres como Sanza y Binéka trabajos de agricultura, costura, a elaborar jabón, a mantener animales domésticos,... Todo eso las ayuda en su mantenimiento futuro. Y hemos conseguido que estas mismas mujeres sean a la vez maestras en 16 pueblecitos de la isla, como un virus bueno, ja, ja, ja,…

Continuamos conversando un poco más. Finalmente nos despedimos con un “hasta la próxima”. ¿Sabéis una cosa?  Le deseé la mejor de las suertes. Todos los niños y niñas se lo merecen.

Desde la Fundación apoyamos encarecidamente los proyectos como estos, gestionados por la hermana Adela, ya que gracias a ellos, personas como Sanza y Binéka podrán labrarse un futuro y escapar de la marginación social y la pobreza.

Una idea para ahorrarnos todos el IVA que pagan las ONG (Fundaciones, asociaciones,…)

En estas fechas de final de año los empresarios suelen ayudar a las ONG. Si vamos a realizar una donación, por ejemplo, de 1180 € a una ONG que (supongamos) necesita camas y mantas para gente sin recursos, en lugar de ... dar el dinero se trata de pedir la factura a nombre de la empresa y donar en especie las camas y mantas a la ONG. De esa manera deduciremos el IVA por lo que será un ahorro.